Siguiendo con la planificación, se ha abierto al tráfico el viaducto del Nudo de Colmenar que sostiene el ramal de conexión entre la M-607, sentido Madrid, y la M-40, sentido A-1.El nuevo viaducto, cuya longitud es de 560,7 m, se ejecutó con prefabricados de hormigón curvos, de canto variable, y de canto constante; la estructura se desarrolla a lo largo de 17 vanos de luces variables. El vano que cruza la M-40 tiene una luz de 56,2 m. La complejidad de la obra radica en su naturaleza, es un nudo de comunicación principal de Madrid. Las obras se ejecutaron en 10 meses, de los cuales se invirtieron solo 6 en la ejecución del nuevo tablero.
